🕔 enero 22, 2019
Este es un post de invitado de Andrés Gananci.
Trabajar de manera autónoma es algo que está siendo cada vez más atractivo para muchas personas ya que se han dado cuenta de la importancia de tener el control de su propio tiempo. Después de todo, este el recurso más valioso que podamos poseer.
Mucha gente se pasa la vida tratando de ganar dinero y a veces se entregan a sí mismos a trabajos que les demandan gran parte de su tiempo y la verdad es que las ganancias no valen todo ese sacrificio.
¿Por qué?
El dinero puede ir, venir, recuperarse e incluso multiplicarse.
¿Has escuchado de alguien cuyo tiempo de vida se multiplique? Si no se hace nada al respecto no. Todos tenemos una esperanza vida de limitada y en Latinoamérica el promedio de esta (tomando en cuenta los 10 países que la tienen más alta) es de 76,37 años, así que no nos podemos dar el lujo de perder ese valioso tiempo.
Ahora, ser freelancer no significa que haces algo de dinero por la web sin tener jefes. Ser freelancer significa que eres capaz de ofrecer tus servicios de manera autónoma, lo que te permite vivir de ello y no solo como un ingreso extra en el que no puedes confiar.
Para poder desempeñarte exitosamente como freelancer necesitas tener un compromiso profundo contigo mismo y con tu libertad, si no será bastante complicado. Es por esto que no todas las personas se atreven a trabajar de forma autónoma, prefieren ser empleados porque les infunde cierta seguridad. Aun así, los freelancers también pueden conseguir una muy buena estabilidad.
Por otro lado, hay varios aspectos que pueden llegar a interponerse entre la estabilidad a la que recién nos estábamos refiriendo y los freelancers. Y es que desde los autónomos nóveles hasta los más experimentados, nadie está completamente exento de conseguir obstáculos en su camino.
Es por ello que hemos realizado este pequeño listado de dificultades con las que probablemente te encuentres si decides trabajar como autónomo, y además te diremos cómo afrontarlas para no dejarte solo con el problema:
1 – Horarios:
La libertad personal y de tiempo es una de las razones más atractivas por las que las personas quieren desempeñarse como freelancers, pero a la vez esta libertad, cuando no está bien manejada, puede convertirse en un arma de doble filo.
Conozco freelancers que trabajan tanto, que no dejan tiempo “libre” par satisfacer sus otras necesidades. De hecho, se dejan absorber tanto por el trabajo que su libertad en vez de verse ampliada se ve cercenada y aunque en muchas ocasiones ganen más, su calidad de vida disminuye, pudiendo enfermarse por la mala alimentación, falta de sueño, estrés y más.
Esto, por supuesto, es una elección.
Sin embargo, hay freelancers que se ven “empujados” a tomar esta decisión para que sus ingresos puedan arropar sus necesidades. Esta situación puede ser muy común, pero no debes conformarte con ella.
Para enfrentarla debes establecer tu propio horario de trabajo (no tiene que ser tradicional, aprovecha tu creatividad y toma en cuenta tus gustos e intereses).
Una vez tengas tu horario empieza a centrarte en proyectos más rentables, es decir, que te den mayores ganancias por menor tiempo invertido. Si no tienes un horario y aceptas cualquier tipo de proyecto sin ningún orden, te expones a pasar largas horas trabajando por bajas remuneraciones.
2 – Administración pobre:
Este es otro punto en el que suelen descuidarse los freelancers y es una tragedia porque no hay sueldo que resista una mala administración y pobres decisiones financieras.
La recomendación es que le des la importancia adecuada leyendo acerca de finanzas personales y administración de autónomos.
Nadie nace aprendido, pero tienes la capacidad de prepararte, y cuando lo haces verás que puedes alcanzar la estabilidad financiera como freelancer incluso más rápido de lo que habrías creído.
Ten un presupuesto de gastos, sé consciente de tus ingresos y que no se te olvide ahorrar. Cada decisión que tomes en este aspecto puede afectarte profundamente, así que no puedes dejarlo al azar, sino tenerlo entre tus prioridades.
3 – Pocos clientes:
Es un problema para los freelancers el tener muchos clientes y no darse abasto, pero la verdadera pesadilla llega cuando no se tienen los suficientes para cubrir los gastos básicos.
En ese punto es que muchas personas se arrepienten de no contar con un sueldo como empleados, pero la verdad es que no hay que llegar a ese punto más que en el punto de partida.
Es decir, es normal que en el inicio de tu carrera como freelancer tengas desde cero hasta pocos clientes, pero de ahí en adelante la idea es que vayas consiguiendo nuevos. Por eso necesitas:
- Diversificarte (no ofrecer solo un servicio específico, sino varios que sean útiles entre sí)
- Trabajar en fortalecer tu marca personal. Si aún no cuentas con una, crea tu marca personal siguiendo estos pasos.
- Prepararte para tener la capacidad de ofrecer servicios de alta calidad que puedan ser remunerados como tal.
- Conocer cuál es tu cliente ideal para que enfoques la mayoría de tus esfuerzos en atraerlos a ellos, los cuales al final de cuentas son los más rentables y los menos complicados.
- Ser disciplinado. No te debes vencer cuando tengas pocos clientes, al contrario. Permite que eso funcione como motivación para no perder el enfoque. La constancia, la paciencia y la disciplina siempre son recompensados.
Sobre el autor: Soy Andrés Gananci, un emprendedor y aventurero apasionado de la vida. Fundé mi primer negocio online con tan sólo 17 años. 12 años después, sigo viajando por el mundo mientras trabajo desde casa. Editor de gananci.com. Puedes encontrarme en Facebook y Gmail.
Buen post que has escrito, así da gusto leer. | Buscando por internet
he llegado aquí mientras tomaba café, me ha gustado bastante tu post y
volveré cada día a ojearlo, muchas gracias.